top of page
  • Negro del icono de Instagram
  • Negro Facebook Icono

El fast fashion, la manera en como vivimos

Foto del escritor: rumoreblogrumoreblog

Desde que tengo uso de razón, siempre he estado comunicada, primero llegó el internet y teníamos que conectarlo a la línea de teléfono fijo, después llegó el msn o messenger, donde platicaba con mis amigos después de clases, de ahí las primeras generaciones de las redes sociales, hasta que llegamos al punto, en donde podemos conseguir lo que sea y cuando sea, desde una aplicación en nuestro smarthphone. Enterándonos de todo lo que está pasando en el mundo sin tener que movernos de la comodidad de nuestra cama todo esto gracias al muy conocido fenómeno de la globalización.





La globalización afectó, todo, nuestra manera de comunicarnos, la manera en cómo nos comportamos y también afecto a la industria de la moda, creando el fast fashion, moda desechable o también conocida como moda barata, la cual todos la hemos consumido o seguimos consumiendo ya sea por las tendencias de la temporada o por su precio accesible. Pero el problema aquí es que cuando compramos ese pantalón o blusa de alguna de estas empresas estamos contribuyendo a una crisis ambiental o social.






Por una parte esta la crisis ambiental que produce la industria de la moda la cual consume el 20% del agua del planeta, produce el 10% de las emisiones del carbono y el 24% de los pesticidas en el mundo, convirtiéndola en la segunda industria más contaminante del mundo, además la mayoría de las prendas que están en estas tiendas están hechas con poliéster, una tela sintética la cual se fabrica mediante la quema de un derivado del petróleo, pero es barata. Y por otra parte tenemos la crisis social, donde 40 millones de personas trabajan en esta industria y más del 50% se encuentra en ciudades como Bangladés, donde los derechos del trabajador no están contemplados en la ley, haciéndolos trabajar casi 24 horas y 7 días de la semana por un salario de no más de 3 dólares al día, además el estar expuestos a químicos tóxicos para la salud. Todo esto para que nosotros compremos un pantalón de $500 o una blusa de $129, los cuales al final del día, vamos a terminar tirando.



El éxito del fast fashion radica en tres cosas; la primera es la modificación mínima de diseños de colecciones enteras a diseñadores, ya sean reconocidos o independientes, a un cuarto de lo que realmente cuesta y casi al minuto de que está saliendo; la segunda es CANTIDAD EN VEZ DE CALIDAD, se prefiere invertir en 100 blusas del mismo modelo con materiales de mala calidad y costuras hechas a la carrera, a 10 blusas con buenos materiales y buena mano de obra; y finalmente la tercera, somos nosotros y nuestra cultura consumista, donde relacionamos el tener muchas cosas con felicidad y riqueza, cuando la realidad es que le estamos dando nuestro dinero a empresas las cuales, no nos están dando un buen producto y al final vamos a terminar gastando más.






Pasamos de tener 2 temporadas anuales a tener 52 “micro-temporadas”, lo que significa que el catalogo de las tiendas se actualiza semanalmente, lo que ayuda a aumentar nuestra cultura consumista y terminamos comprándonos prendas, que no necesitamos y que van a terminar en el fondo de nuestro closet y las que si usemos van a terminar rompiéndose o dañándose, porque como dice su nombre es moda desechable, diseñada para que deje de funcionar y reemplazarla con alguna nueva.




La industria, tiene que cambiar, pero sobre todo nosotros tenemos que cambiar, empecemos a comprar por nuestro estilo, y no tanto por las tendencias, busquemos calidad en vez de cantidad, optemos por otras opciones como el slow fashion, comprar con diseñadores locales, bazares, tianguis o tiendas de segunda mano y la ropa que ya no nos guste o que no usemos suprareciclarla y así darle una segunda vida.


Opciones hay tantas como excusas, dejemos de hacernos de la vista gorda respecto a estos problemas y empecemos a poner nuestro granito de arena, empecemos a usar moda responsable.

Comments


articulos recientes

© 2019 by OA. 

bottom of page